Libertad de Culto
La Primera Enmienda comienza con las palabras «El Congreso no adoptará ley alguna con respecto al establecimiento de religión o la prohibición del libre ejercicio de la misma» No es casual que los autores de la Carta de Derechos comenzaran con las cláusulas relacionadas con la religión. Para los fundadores de la nación, la libertad de culto no se diferenciaba de los derechos políticos de la libre expresión, asociación, asamblea, prensa, ni del derecho a no estar sujeto a registros, secuestros o inquisiciones no razonables.
Por lo tanto no es sorprendente que muchos de los casos más importantes sobre «libertad de expresión» o «libertad de asociación» ante la Corte Suprema han estado relacionados con la libre práctica de la religión, y frecuentemente, fueron presentados por o en contra de grupos nuevos o de minorías, grupos religiosos o sectas controversiales, como por ejemplo los Testigos de Jehova, los Adventistas del Séptimo Día, o los Cuáqueros. Esta misma lucha por parte de grupos nuevos, minorías y grupos religiosos muchas veces controversiales ha continuado hasta tiempos recientes.
Durante tres décadas el Bufete ha estado a la vanguardia de estos casos legales y ha litigado exitosamente casos históricos sobre el tema. Entre estos casos se incluyen los siguientes:
Protección de organizaciones religiosas contra la interferencia y trato discriminatorio pervasivo del gobierno
En un innovador caso, la Corte de Apelaciones del Onceno Circuito de Estados Unidos invalidó una ley de la Ciudad de Clearwater, Florida, que obligaba a las iglesias a revelar públicamente información financiera detallada y a estar sujeta a continua vigilancia oficial. La Corte halló evidencias consistentes de que la Ley estaba dirigida contra la Iglesia de Cientología, que su objetivo era sacar a esta Iglesia de la Ciudad y que la Ley fue elaborada solamente para aplicarse a esta Iglesia en particular. El Bufete representó a la Iglesia en este litigio que duró nueve años. Finalmente, se obligó a la Ciudad a revocar la Ley y pagar los honorarios de los abogados de la Iglesia. Church of Scientology Flag Service Organization v. City of Clearwater.
En un caso muy similar, el Bufete representó a una iglesia cristiana en el estado de Carolina del Norte en un litigio contra el Departamento de Servicios Sociales del Condado local. El Departamento amenazó con quitarles los niños a todos los miembros de la iglesia sobre la base de que las creencias religiosas de la Iglesia constituían abuso infantil. El bufete argumentó que los esfuerzos del Condado fueron parte de un intento de forzar a la Iglesia a salir de la comunidad y violaba los derechos de libertad de culto de la Iglesia y de sus miembros. Después de que una corte federal reconoció la base legal de la reclamación de la Iglesia, el Condado acordó dejar a un lado sus esfuerzos y pagar los honorarios de los abogados de la Iglesia. Word of Faith Fellowship v. Rutherford County Department of Social Services.
Derecho de los individuos a practicar su creencia sin interferencia privada
En el caso Scott v. Ross, el Bufete logró en el proceso de apelación la confirmación de una sentencia multimillonaria bajo la ley de derechos civiles a nombre de un hombre que fue secuestrado por «deprogramadores», detenido por varios días y sujeto a adoctrinamiento en un intento de obligarlo a abandonar sus creencias cristianas fundamentalistas. Entre los demandados estaba Rick Ross, un auto-nombrado «experto» en «cultos» que ha estado involucrado en numerosas «deprogramaciones» de ese tipo, y el Cult Awareness Network, que la Corte determinó fue quién autorizó o dirigió dichos asaltos violentos.
En un caso sobre asuntos relacionados con lo anterior, el Bufete trabajó como co-asesor del Profesor Laurence Tribe de la Facultad de Derecho de Harvard en una exitosa apelación acerca de un acto semejante de «deprogramación». La Corte condenó la práctica fuertemente y determinó que las leyes federales de derechos civiles proporcionen una reparación a las victimas. Columbrito v. Kelly.
Proselitismo religioso
El Bufete logró una decisión importante de una corte federal de apelación que validó la práctica de los proselitistas religiosos de colocar plegables en los parabrisas de automóviles parqueados en calles públicas. Krantz v. City of Dyer.
El caso de la Ciudad de Clearwater mencionado arriba también protegió los derechos de la iglesia a hacer proselitismo y a solicitar fondos de sus miembros y el público sin la interferencia del gobierno.
Demandas de responsabilidad civil contra iglesias
El Bufete ha litigado casos históricos en los que se ha determinado que las iglesias no tienen que responder a reclamaciones por fraude o conducta escandalosa basadas en el ejercicio pacífico de prácticas religiosas. Christofferson v. Church of Scientology; Meroni v. Holy Spirit Association.
Hacienda
Casos llevados por el Bufete, incluyendo dos ante la Corte Suprema, establecieron precedentes afirmando que las iglesias disfrutan de protecciones especiales frente a investigaciones impertinentes del IRS. United States v. Zolin ; Church of Scientology International v. United States ; United States v. Church of Scientology Western United States ; United States v. Church of Scientology of Boston .
El Bufete litigó varios casos afirmando que el IRS debe permitir descuentos de impuestos por los pagos fijos a una iglesia por servicios religiosos. Foley v. Commissioner ; Staples v. Commissioner . Posteriormente, el Bufete litigó dos casos afirmando que el IRS puede ser obligado a permitir descuentos por dichos pagos ya que permite descuentos por los pagos estructurados de modo semejante a iglesias de otras denominaciones. Powell v. United States ; Garrison v. Commissioner . Mientras la litigación estuvo pendiente, el IRS acordó permitir dichas deducciones.
El Bufete ha litigado varios casos relacionados con el derecho de las iglesias a estar exentas de impuestos.
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